Por las almas
que estén en el purgatorio
(Diario, N° 1226)
Jesús
misericordioso, tú mismo has dicho que deseas la misericordia, he aquí
que yo llevo a la morada de tu compasivísimo Corazón a las almas del
purgatorio, almas que te son muy queridas, pero que deben pagar su culpa
adecuada a tu justicia. Que los torrentes de sangre y agua que brotaron
de tu Corazón, apaguen el fuego del purgatorio para que también allí
sea glorificado el poder de tu misericordia.
Padre Eterno,
mira con misericordia a las almas que sufren en el purgatorio y que
están encerradas en el compasivísimo Corazón de Jesús. Te suplico por la
dolorosa pasión de Jesús, tu Hijo, y por toda la amargura con la cual
su sacratísima alma fue inundada, muestra tu misericordia a las almas
que están bajo tu justo escrutinio. No las mires sino a través de las
heridas de Jesús, tu amadísimo Hijo, ya que creemos que tu bondad y tu
compasión no tienen límites. Amén.
Invocación para todos
los días de la Novena
los días de la Novena
Oh Sangre y Agua que brotaste del Corazón de Jesús como manantial de misericordia para nosotros, en ti confío.
Coronilla de la Divina Misericordia
Texto tomado del Libro: Novena del Señor de la Divina Misericordia - Caballeros de la Virgen