Por Infovaticana | 23 de Noviembre de 2021
El ex nuncio apostólico en Estados Unidos, Carlo María Viganó, ha vuelto a aparecer en público para denunciar que «desde hace dos años asistimos a un golpe global, en el que una élite financiera e ideológica ha logrado tomar el control de parte de los gobiernos nacionales, instituciones públicas y privadas, medios de comunicación, poder judicial, políticos y líderes religiosos».
El purpurado italiano ha denunciado en un vídeo que «todos ellos, sin distinción, se han convertido en esclavos de estos nuevos amos que aseguran poder, dinero y afirmación social a sus cómplices. Los derechos fundamentales, que hasta ayer se presentaban como inviolables, han sido pisoteados en nombre de una emergencia: hoy una emergencia sanitaria, mañana una emergencia ecológica, y después una emergencia de Internet».
Viganó habla en su mensaje de un «golpe global que priva a los ciudadanos de cualquier posibilidad de defensa, ya que los poderes legislativo, ejecutivo y judicial son cómplices de violar la ley, la justicia y el propósito para el que existen». El ex nuncio apostólico del Vaticano en EE.UU, sostiene que nos enfrentamos a «una guerra mundial, donde los enemigos somos todos, incluso aquellos que sin saberlo aún no han entendido el significado de lo que está sucediendo. Es una guerra que no se libra con armas sino con reglas ilegítimas, políticas económicas perversas y limitaciones intolerables a los derechos naturales».
El arzobispo señala directamente a las organizaciones supranacionales, «financiadas en gran parte por los conspiradores de este golpe» y que «están interfiriendo en el gobierno de las naciones individuales y en la vida, las relaciones y la salud de miles de millones de personas y lo hacen por dinero para instaurar una dictadura planetaria». Viganó insiste en que esta situación «es el gran reinicio del Foro Económico Mundial, la Agenda 2030 de las Naciones Unidas. Es el plan del Nuevo Orden Mundial, en el que una República Universal esclaviza a todos y una Religión de la Humanidad anula la Fe en Cristo».
El ex nuncio hace un llamamiento a «formar una Alianza internacional antiglobalista, que reúna a todos aquellos que quieren oponerse a la dictadura, que no tienen intención de convertirse en esclavos de un poder sin rostro, que no están dispuestos a borrar su propia identidad, su individualidad, su fe religiosa. Si el ataque es global, la defensa también debe ser global», ha insistido el purpurado.
Del mismo modo, ha lanzado una invitación a «gobernantes, líderes políticos y religiosos, intelectuales y a todas las personas de buena voluntad, invitándolos a sumarse a una Alianza que lance un manifiesto antiglobalista, refutando punto por punto los errores y desviaciones de la distopía del Nuevo Orden Mundial y proponiendo alternativas concretas para un programa político inspirado en el bien común, los principios morales del cristianismo, los valores tradicionales, la protección de la vida y la familia natural, la protección de la empresa y el trabajo, la promoción de la educación y la investigación, el respeto a la Creación».
Carlo María Viganó pretende que esta «Alianza Antiglobalista deberá unir a las naciones que pretenden escapar del yugo infernal de la tiranía y afirmar su soberanía, mediante la celebración de acuerdos de colaboración mutua con naciones y pueblos que compartan sus principios y el deseo común de libertad, justicia y bondad». Para ello, «tendrá que denunciar los crímenes de la élite, identificar a los responsables, denunciarlos ante los tribunales internacionales y limitar su excesivo poder e influencia dañina», ha manifestado Viganó.
Por último, Viganó concluye su mensaje invitando de nuevo a los países y sus ciudadanos a «aliarse bajo la Cruz de Nuestro Señor Jesucristo, el único Rey y Salvador, el Príncipe de Paz». Viganó termina pidiendo dotar a esta «Alianza Antiglobalista, de un programa simple y claro, y liberemos a la humanidad de un régimen totalitario que aglutina los horrores de las peores dictaduras de todos los tiempos».
Fuente - Texto tomado de INFOVATICANA.COM: