sábado, 26 de junio de 2021

Lectura del Santo Evangelio según San Mateo 8, 5-17



5. Y al entrar en Cafarnaúm le salió al encuentro un centurión, y le rogaba.

6. Diciendo:


"Señor, un criado mío está postrado en mi casa, paralítico, y padece muchísimo"


7. Dícele Jesús:


"Yo iré y lo curaré"


8. Y le replicó el centurión:


"Señor, no soy yo digno de que Tú entres en mi casa; pero mándalo con Tu Palabra, y quedará curado mi criado"


9. "Pues aún yo, que no soy más que un hombre sujeto a otros, como tengo soldados a mi mando, digo al uno: marcha, y él marcha, y al otro: ven, y viene; y a mi criado: haz esto, y lo hace"


10. Al oír esto Jesús, mostró grande admiración, y dijo a los que le seguían:


"En verdad os digo que ni aún en medio de Israel he hallado fe tan grande"


11. "Así os declaro que vendrán muchos gentiles del oriente y del occidente, y estarán a la mesa con Abrahán, Isaac y Jacob en el reino de los cielos".


12. "Mientras que los hijos del reino (los judíos) serán echados fuera, a las tinieblas: allí será el llanto, y el crujir de dientes".


13. Después dijo Jesús al centurión:


"Vete, y sucédate conforme has creído".


Y en aquella hora misma quedó sano el criado.

14. Habiendo después Jesús ido a casa de Pedro, vió a la suegra de éste en cama con calentura.

15. Y tocándole la mano, se le quitó la calentura; con eso se levantó luego de la cama, y se puso a servirles.

16. Venida la tarde, le trajeron muchos endemoniados, y con su Palabra echaba los espíritus malignos, y curó a todos los dolientes.

17. Verificándose con eso lo que predijo el profeta Isaías, diciendo:


"Él mismo ha cargado con nuestras dolencias, y ha tomado sobre Sí nuestras enfermedades".


Palabra de Dios,
Gloria a Ti, Señor Jesús