Por Stephen Kokx
En 1884 en su Encíclica Humanum Genus, el Papa León XIII escribió lo siguiente:
La carrera del hombre, después de su desgraciada caída de Dios... se separó en dos partes diversas y opuestas...
El uno es el reino de Dios en la tierra, es decir, la verdadera Iglesia de Jesucristo...
El otro es el reino de Satanás, en cuyo poder y control están todos y cualquiera que siga el ejemplo fatal de su líder y de nuestros primeros padres, los que se niegan a obedecer la ley divina y eterna, y que tienen muchos objetivos de su propio desprecio de Dios...
Su Santidad llegó a decir:
"En cada período de tiempo que cada uno ha estado en conflicto con el otro, con una gran variedad y multiplicidad de las armas y de la guerra, aunque no siempre con el mismo ardor y asalto"
En este período, sin embargo, los partidarios del mal parecen estar combinando juntos, y estar luchando con vehemencia unida, llevados o asistidos por esa asociación fuertemente organizada y generalizada llamada los Masones.
El Santo Padre se puso a escribir una crítica mordaz de los masones, demostrando de lo malvados que realmente son que, por supuesto, que a ellos no les gustaba. Pero eso es tema para otro post.
Por ahora, me quiero centrar en la primera parte de la encíclica de León, la parte que habla del reino de Satanás. En concreto, me gustaría centrarme en el descaro de aquellos que propagan sus mentiras, que se está convirtiendo en una expresión pública de su admiración por él y la "multiplicidad de armas" que emplean para atraer a otros a unirse a ellos en el camino de la perdición.
Cualquiera que haya visto los Premios Grammy de este fin de semana pasado, sabe de lo que estoy hablando.
Bajo el disfraz de "expresión artística", Katy Perry, quien anunció que es una no cristiana más, implícitamente dijo al mundo de cuál lado está ella.
Su presentación, de la cual publicó E!, que se inspiró diabólicamente, porque se llenó con el fuego, el simbolismo y la imaginería oscura infernal.
La naturaleza satánica de la rutina de Perry al parecer provocó que la cantante de gospel cristiano Natalie Grant se retirara más temprano del recinto de los Grammy.
El ex-mariscal de Alabama AJ McCarron no podía tampoco dejar de notar la presencia del mal, en Twitter escribió: "¿Soy yo o son algunas de las actuaciones de los Grammy que hasta el momento parece ser realmente demoniaco?? Parece que hay mucha maldad en el mundo... "
No, no eres sólo tú, AJ, hay mucha maldad en el mundo, especialmente en Hollywood. Simplemente se esconde bajo el pretexto de "entretenimiento".
Pero espere. ¡Hay más!
Durante otra actuación por alguien que dice ser un músico, la institución del matrimonio fue burlado y degradado cuando 34 almas intercambiaron votos matrimoniales. En un intento de mostrar ostensiblemente al mundo que el matrimonio realmente es para todo el mundo, las parejas heterosexuales, parejas mayores, parejas jóvenes y las parejas homosexuales todos alineados en una fila y, cuando la actriz Queen Latifah dijo las palabras mágicas, poof, se convirtieron en compañeros de vida, quiero decir, los cónyuges, quiero decir, bueno, usted lo consigue...
Por último, pero no menos importante, el rapero Jay-Z y su esposa Beyonce trató a la audiencia a una cornucopia de imágenes lujuriosas durante un recital de su canción "Drunk In Love", que sin duda forzó la mente del espectador a poblarse con todo tipo de miserables e impuros pensamientos.
Si eres como yo, lo más probable es que también te llenaste de ira al ver la plataforma del mal que le fue dada a los premios Grammy de este año. No creo que ese sentimiento es erróneo. Es, de hecho, una buena cosa. Porque es una ira justa que evidencia el hecho de que tu alma está orientada correctamente a Dios, que tú estás dispuesto a vivir de acuerdo a la Voluntad de Dios, y que desprecias lo que conduce a las almas en el abismo.
Sólo recuerda que nuestra guerra como católicos no es contra la sangre y la carne. Es en contra de los espíritus de la maldad y el príncipe de las tinieblas. Como el Papa León XIII dijo una vez:
"Los católicos nacen para el combate"
Únete a mí en esa batalla.
Fuente - Texto tomado de CATHOLICVOTE.ORG: