miércoles, 22 de mayo de 2024

Episodio desgarrador (Primera Guerra Mundial): 7.000 soldados cayeron esa noche y sólo quedó en pie desfigurado - el Cristo de las Trincheras

 

  



C.L. / ReL / 31 de mayo de 2015


Cerca de Lille, casi en la frontera francesa con Bélgica, entre las localidades de La Couture y Neuve-Chapelle, se hallaba asentada la 2ª División de Infantería del Cuerpo Expedicionario Portugués. 

Llevaban ya un tiempo en sus trincheras aquella primavera de 1918 y muchos de los soldados lusos se habían acostumbrado a rezar al Cristo clavado en una cruz de madera que, desde su enorme altura, llevaba cuatro años contemplando los horrores de la Primera Guerra Mundial en los campos europeos.




El fotógrafo Arnaldo Garcês inmortalizó a sus pies, en octubre del año anterior, a un soldado de los que guardaban la posición en tiempos más tranquilos y aún podían acercarse al crucero, situado en una encrucijada.


Diezmados por la artillería


Pero el 9 de abril se presagiaba un enfrentamiento total. Los alemanes, en plena ofensiva, se marcaron como objetivo ese lugar. Antes de que avanzaran los fusileros, sometieron a la zona a un auténtico infierno de fuego de artillería. Durante horas cayeron las bombas hasta reducir a cenizas Neuve-Chapelle, y no sólo esa localidad se despertó muerta cuando se levantó la nube de humo y polvo: allí yacían también los cadáveres de más de siete mil soldados portugueses.




Entonces empezó a perfilarse algo más: entre la tierra y las rocas levantadas, superviviente a llamas arrasadoras y a trincheras arrasadas, derruidos el crucero y la cruz, se erguía aún enhiesto el Jesús cuya visión postrera servía de consuelo a los moribundos. Aunque rotos brazos y piernas y llagado (de nuevo) el cuerpo a base de metralla y balas perdidas, el Cristo de las Trincheras, en apariencia derrotado, se inscribía en las mejores páginas de la historia militar portuguesa. Habían aguantado la posición cuanto pudieron, hasta caer casi todos, incluido el crucifijo que, con el tiempo, habían hecho suyo.




Los portugueses lograron reagruparse y mantener las líneas, y al hacerlo no se olvidaron de su divino acompañante. Como a un herido más, éste con las piernas y un brazo mutilados y un disparo en el pecho, recogieron al Cristo para llevarlo a un lugar donde pudiese ser conservado y venerado, y se mantuvo con ellos el resto de la batalla.


Lo sentían como suyo, y fue suyo


Cuarenta años después, quienes habían estado allí no olvidaban aquella imagen, y los soldados consideraban timbre de gloria haber combatido a su lado en la conocida como batalla de La Lys. Así que en 1957 el gobierno de Antonio de Oliveira Salazar se dirigió al gobierno de René Coty y pidió que le fuese cedido para su custodia, pasando a ser patrimonio de la Liga de Combatientes y símbolo del patriotismo nacional.

La imagen llegó a Lisboa el 4 de abril de 1958, acompañada por ex combatientes y una delegación de diputados franceses encabezada por el coronel Louis Christian. Fue expuesta para la veneración pública cuatro días en la Escuela del Ejército, y su paso por las calles de Lisboa fue apoteósico.




El 9 de abril, tras una ceremonia de honores presidida por el coronel Santos Costa, ministro de Defensa, instaló en su ubicación actual, la sala capitular del majestuoso Monasterio de Nuestra Señora de la Victoria, más conocido como Monasterio de Batalha, donde una guardia permanente rinde tributo al soldado desconocido.


Fuente - Texto tomado de RELIGIONENLIBERTAD.COM:
https://www.religionenlibertad.com/cultura/42732/siete-mil-soldados-cayeron-esa-noche-solo-quedo-en-pie-desfigurado.html

Novena a María Auxiliadora - Día Noveno - Mayo 23 de 2024

 

  



Novena a María Auxiliadora
Noveno día
Para pedir el triunfo
de la Santa Iglesia

Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos líbranos Señor, Dios nuestro. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.


Oración preparatoria


¡Oh María Auxiliadora, vengo a postrarme humildemente a tus plantas, para tributarte mi homenaje de amor y gratitud! Indigno soy de recibir nuevos favores de tu mano amorosísima, pues no he correspondido a las innumerables gracias que me has dispensado a cada paso. Olvidando mi ingratitud y no pensando más que en tu amor y benignidad, vengo a implorar nuevamente tus auxilios. Concédeme la gracia que deseo..., si no es contraria a la Voluntad de Dios. No me desampares, Madre mía, robustece mi voluntad para que no me aparte del verdadero camino de la virtud; ilumina mi entendimiento para que comprenda cuánto me amas, y santifícame para que logre, mediante tu valiosísimo socorro, alabarte por toda la eternidad. Así sea.


Oración para pedir el triunfo
de la Santa Iglesia






¡Oh Virgen incomparable! que por la asombrosa victoria de Lepanto, resplandeciste con el nuevo título de Auxiliadora... Oh Madre benigna, poderoso auxilio de los cristianos, concédeme la gracia que te pido... y vuelve a tus antiguas victorias en estos tiempos de osada impiedad. Guarda piadosamente al Vicario de Jesucristo en la tierra, santifica a los Eclesiásticos y a los Religiosos, y apresura la hora de la misericordia para todos y del triunfo de la Iglesia Católica, a fin de que todo el mundo te aclame a Ti, su Madre y su Reina, y a tu Jesús, su Rey y Salvador. Amén.


Padre Nuestro, Ave María y Gloria.


Oración final


¡Dios te salve Reina, Madre de misericordia y auxilio de los cristianos! Pobre hijo de Eva, a quién me dirigiré en este valle de llanto sino a Ti que eres vida, dulzura y esperanza nuestra! A Ti se eleva mi grito: A TI CLAMAMOS!, a tus pies deposito el peso de mis afanes: A TI SUSPIRAMOS!... Ea, pues, Señora, manifiéstate como lo fuiste siempre, poderosa Abogada: inclina tus ojos maternales sobre mí que te amo tanto, ¡Oh Madre!, hoy más que nunca necesito de tu misericordia y de tu santo auxilio...! ¡Ah! vuelve hacia mí esos ojos tan misericordiosos y quedaré contento... Es verdad, yo soy culpable, pero Tú eres Santa: ¡Oh CLEMENTE! Yo soy ingrato, pero Tú eres buena! ¡OH PIADOSA! Yo soy rebelde, pero Tú eres dulce! ¡Oh DULCE VIRGEN MARIA! No mires mis culpas y pecados y acuérdate sólo de tu bondad: ¡MUESTRATE QUE ERES MADRE! Yo me abandono y entrego a Ti como un niño se abandona confiado en los brazos de su madre.


María, Auxilio de los Cristianos
Ruega por nosotros


En el nombre del Padre, ...




Novena a María Auxiliadora
propagada por San Juan Bosco




 Rezar, durante nueve días seguidos, tres Padrenuestros, Avemarías y Glorias con la siguiente jaculatoria:


"Sea alabado y reverenciado en todo momento el Santísimo y Divinísimo Sacramento"


Y luego tres Salves con la jaculatoria:


"María Auxilio de los Cristianos, ruega por nosotros"


 Recibir los Santos Sacramentos de Confesión y Comunión.

 Hacer o prometer una limosna en favor de las obras de apostolado de la Iglesia o de las obras salesianas.

San Juan Bosco decía:


"Tened mucha fe en Jesús Sacramentado y en María Auxiliadora y estad persuadidos de que la Virgen no dejará de cumplir plenamente vuestros deseos, si han de ser para la gloria de Dios y bien de vuestras almas. De lo contrario, os concederá otras gracias iguales o mayores"


Novena de la Confianza




Madre mía de mi vida,
auxilio de los cristianos,
la pena que me atormenta,
pongo en tus benditas manos.
(Ave María)

Tú que sabes mis secretos,
pues todos te los confío,
da la paz a los turbados
y alivio al corazón mío.
(Ave María)

Y aunque tu amor no merezco,
nadie recurre a Ti en vano,
pues eres Madre de Dios
y Auxilio de los cristianos.
(Ave María)


Finalmente, se reza:


Oración de San Bernardo




Acordaos, ¡oh piadosísima Virgen María! que jamás se ha oído decir que ninguno de los que han acudido a vuestra protección, implorado vuestra asistencia y reclamado vuestro socorro, haya sido abandonado de Vos. Animado con esta confianza, a Vos también acudo, ¡oh Madre, Virgen de las vírgenes! Y aunque gimiendo bajo el peso de mis pecados, me atrevo a comparecer ante vuestra presencia soberana. No desechéis, ¡oh Madre de Dios!, mis humildes súplicas, antes bien, inclinad a ellas vuestros oídos y dignaos atenderlas favorablemente.


Fuente - Texto tomado de ACIPRENSA.COM: