viernes, 13 de enero de 2023

¿Qué nos dice el Silencio de Dios? Por favor lea esta antigua leyenda noruega y se sorprenderá

  



Cuenta una antigua leyenda noruega, sobre un hombre llamado Haakon, que siempre miraba una imagen de Cristo crucificado en una cruz que era muy antigua.

La gente acudía a orar con mucha fe. Muchos estaban pidiéndole a Cristo algún milagro.

Un día el ermitaño Haakon quiso pedirle un favor.




Impulsado por un sentimiento de generosidad, bondad y amor, se arrodilló ante la cruz y dijo:


"Señor, quiero padecer y morir por Ti. Déjame ocupar tu puesto. Quiero... en la Cruz"


Y se quedó con la mirada fija puesta en Él, como esperando una respuesta. El Señor abrió sus labios y habló. Sus palabras cayeron del cielo, susurrantes y amonestadoras:


"Mi fiel siervo, te concederé tu deseo, pero sólo con una condición”

"¿Cuál, Señor?  ¿Es una condición difícil?"

"¡Estoy dispuesto a cumplirla con tu ayuda, Señor!"


Respondió el viejo ermitaño.


"Escucha: suceda lo que suceda y veas lo que veas, tienes que guardar silencio siempre"


Haakon contestó:


"¡Os, lo prometo, Señor!"


Y se efectuó el cambio. Nadie advirtió el trueque. Nadie reconoció al ermitaño, colgado con los clavos en la Cruz. Y durante mucho tiempo mantuvo el acuerdo y nunca le habló a nadie.

Pero un día, llegó un hombre rico, y después de haber orado, dejó allí olvidada su cartera.

Haakon le vio y guardó silencio. Tampoco habló cuando un pobre, que vino dos horas después, tomó la cartera del rico y se la guardó. También guardó silencio cuando un hombre joven se arrodilló ante él poco después para pedirle su gracia antes de emprender un largo viaje. Entonces volvió a entrar el rico a buscar su cartera, al no encontrarla, pensó que el joven se la había llevado.

El rico se volvió al hombre joven y le gritó iracundo:

 

"¡Dame la cartera que me has robado!"


Él replicó:


"¡No he robado ninguna cartera!"

"¡No mientas, devuélvemela enseguida!"


El joven repitió:


“Le digo que no he tomado ninguna cartera de nadie”...


El rico empezó a golpearle furioso. Entonces una voz potente llenó el aire:


"¡Detente!"


El rico miró hacia arriba y vio que la imagen le hablaba, Haakon que no pudo permanecer en silencio, gritó defendiendo al joven e increpó al rico por la falsa acusación. Éste se quedó asombrado y se marchó del lugar. El joven salió también porque tenía prisa para emprender su viaje.

Cuando la Cruz se quedó a solas, Cristo se acercó a su siervo y le dijo:


"Baja de la Cruz. No sirves para ocupar Mi puesto. No has podido guardar silencio"

"¡Señor!" -dijo Haakon-, "¿Cómo iba a permitir semejante injusticia?"


Jesús de nuevo ocupó su lugar en la Cruz y el ermitaño se quedó de pie debajo de la Cruz. El Señor, siguió hablando:




"Tú no sabías que al rico le convenía perder la cartera, pues llevaba en ella dinero para cometer un pecado sexual con una joven virgen. Mientras que el pobre, por su absoluta pobreza, tenía necesidad de ese dinero. En cuanto al joven, hubiera sido mejor que le hubiera dado la paliza el rico a causa del malentendido, en cuyo caso no se hubiera ido de viaje. Ahora, ves, hace unos minutos acaba de morir en un naufragio. Tú no sabías todas estas cosas PERO YO SÍ. Por eso callo"


Y el Señor nuevamente guardó silencio.

Muchas veces nos preguntamos:

¿Por qué razón Dios no nos contesta?

¿Por qué razón se queda callado Dios?

A muchos nos gustaría que Él nos respondiera según nuestra voluntad y deseos... pero, la forma de actuar de Dios es diferente. Él conoce el pasado, el presente, y el futuro.


"Cristo Jesús permanece hoy como ayer y por la eternidad" (Heb. 13,8)


Dios nos responde aún con el silencio... Debemos estar dispuestos a escucharle y esperar en Él.


"Pues sus proyectos no son los míos, y mis caminos no son los mismos de ustedes, dice Yavhé. Así, como el cielo está muy alto por encima de la tierra, así también mis caminos se elevan por encima de sus caminos y mis proyectos son muy superiores a los de ustedes" (Is. 55,8-9)

"Porque yo sé muy bien lo que haré por ustedes; les quiero dar paz y no desgracia y un porvenir lleno de esperanza, palabra de Yavhé" (Jr. 29,11)


Un hombre debe comprender lo que significa el divino silencio y rendirse a los caminos del Señor y orar como el Salmista:


"Yo te amo, Señor, mi Fuerza, Señor, mi Roca, mi Fortaleza y mi Libertador, mi Dios, el peñasco en que me refugio, mi escudo, mi fuerza salvadora, mi baluarte. Invoqué al Señor, que es digno de alabanza y quedé a salvo de mis enemigos" (Sal. 18,2-4)


Fuente - Texto tomado de jmanjackal.net:

Divina Pastora - Patrona de Barquisimeto (Venezuela) - Fiesta Enero 14

  



La Divina Pastora de Barquisimeto es uno de los iconos religiosos más importantes de Venezuela, la imagen original que data de 1735, y es la que sale en procesión cada 14 de enero.


Historia


Según los libros de historia, esta devoción proviene de Sevilla (España). Un sacerdote capuchino de nombre Isidoro de Sevilla, recibió una revelación en uno de sus sueños. Era la imagen de la Divina Pastora. Días más tarde, le dio al artista Alonso Miguel de Tovar, una descripción detallada de su visión para que éste realizara un cuadro. La imagen de la virgen con sombrero pastoril, cubierta por un manto azul, sosteniendo en su mano izquierda al niño y apoyando la derecha sobre un cordero, fue llamada "Divina Pastora de las Almas".

Años más tarde, el escultor Francisco Ruiz Gijón, esculpió la imagen tamaño natural de la Divina Pastora. Y en el año 1705, la imagen fue llevada a su primera procesión en este país europeo.

La historia de la Divina Pastora en Venezuela se remonta al año 1736, fecha en la que el párroco de la población de Santa Rosa le encomendó a un escultor que le hiciera una imagen de la Inmaculada Concepción. Sin saber por qué, la figura que llegó al pueblo fue la de la Divina Pastora y aunque el sacerdote quiso devolverla, no pudieron, pues el cajón estaba muy pesado. El pueblo entero dedujo que este extraño hecho indicaba que la efigie religiosa deseaba quedarse en Santa Rosa.

Además de esta curiosa historia, en el siglo XIX ocurrió otro hecho fantástico que la consolidó como la patrona del estado Lara. En el año 1855 hubo una epidemia de cólera que afectó a Venezuela. Una gran cantidad de familias de Barquisimeto sufrió graves consecuencias por este mal y ya desesperados le imploraron a esta imagen religiosa que los ayudara. Se cuenta que el sacerdote José Macario Yépez, párroco de la barquisimetana iglesia de la Concepción, se ofreció ante la Virgen a ser la última víctima de la enfermedad. Algunas historias dicen que seis meses después del ofrecimiento, el sacerdote murió y la epidemia abandonó la ciudad; otras, indican que el mismo día de la petición cesó la epidemia


Procesión


File:Procesionpastora.jpg


El 14 de enero de cada año, se realiza en el estado Lara una procesión en honor a la Divina Pastora, en la que los fervorosos trasladan la imagen desde su iglesia en el pueblo de Santa Rosa hasta la Catedral Metropolitana de Barquisimeto, este recorrido tiene un poco más de 7.5 km. dando inicio con la última misa realizada en las afueras del templo de Santa Rosa a las 10:00 a.m. La Virgen comienza el peregrinar aproximadamente a las 11:30 a.m., la procesión tiene una duración de casi 7 horas, teniendo la tradicional parada en la plaza Macario Yépez. Culminando con la misa de llegada celebrada a lo largo y ancho de la Av. Venezuela, teniendo diferentes actos culturales y musicales que finalizan una jornada llena de fervor y fe Mariana. Luego la "Pastorcita" visita las 52 parroquias de la ciudad, 3 Vicarías y 2 Iglesias Filiales; para luego emprender de regreso a su santuario, donde permanecerá hasta el próximo 14 de enero. Es la primera procesión religiosa más importante de Latinoamérica.

Esta celebración constituye uno de los iconos religiosos más importantes de Venezuela, es una de las manifestaciones más seguidas en el país.


Milagros que aumentan la fe


Es la patrona de Barquisimeto, y es una de las vírgenes más queridas y seguidas de esa zona del país. Cada 14 de enero se celebra una multitudinaria procesión, que es considerada la más grande de Latinoamérica después de la Virgen de Guadalupe en México. Es la tercera concentración Mariana más grande del mundo, detrás de la Virgen de Guadalupe (México) y la Virgen de Fátima (Portugal), respectivamente primera y segunda.

El terremoto del 26 de marzo de 1812 (que devastó las ciudades de Caracas, Barquisimeto, Mérida, el Tocuyo y San Felipe), destruyó el templo donde se veneraba a la Divina Pastora, pero ella quedó intacta, lo que reforzó la creencia de los fieles de Santa Rosa de que la Virgen quería quedarse para protegerlos.

Otro hecho que consolidó la fe de los devotos ocurrió en 1855 al desatarse en Venezuela una terrible epidemia de cólera que diezmó a muchas familias de Barquisimeto. La enfermedad no cedía ante medicinas, lamentos ni plegarias, y la desesperada población decidió como último remedio sacar en procesión por las calles de Barquisimeto a la Divina Pastora, para implorar su misericordia, la cual se supone fue concedida, ya que a partir de ese mismo día, según se cuenta, cesó la epidemia de cólera.


Museo Arquidiocesano
de la Divina Pastora




Al lado del templo, está el Museo Arquidiocesano de la Divina Pastora, donde los visitantes pueden apreciar la imagen original que data de 1735, sus vestidos e innumerables ofrendas que allí conservan.

Más de 127 vestidos utilizados por la imagen.
Sombreros.
Bastones.
Zapatos.
Joyas.
Coronas.
Rosarios.
Condecoraciones otorgadas a la virgen.
Promesas y milagros plasmados en placas.
Cuadros.


Fuente - Texto tomado de OBLATOS.COM:
http://www.oblatos.com/dematovelle/index.php?option=com_content&view=article&id=4632:14-de-enero-fiesta-de-la-divina-pastora-patrona-de-barquisimeto-venezuela&catid=124:legion-de-maria&Itemid=166