martes, 4 de febrero de 2020

Oremos por: víctimas del terrorismo - guerras en el mundo - católicos perseguidos - personas secuestradas y damnificados por desastres naturales





Oración al Divino Niño Jesús

para verse libre de peligros

DIVINO NIÑO JESUS


Señor Dios, Rey Omnipotente
en tus manos están puestas todas las cosas.
Si quieres salvar a tu pueblo
nadie puede resistir a tu voluntad.
Tú hiciste el cielo y la tierra,
y todo cuanto en ellos se contiene.
Tú eres el dueño de todas las cosas.
¿Quién podrá pues resistir a tu Majestad?
Señor Dios de nuestros padres,
ten misericordia de tu pueblo,
porque los enemigos del alma quieren perdernos
y las dificultades que se nos presentan
son muy grandes, Tú has dicho:
"Pedid y se os dará.
El que pide recibe.
Pero pedid con fe".
Escucha pues nuestras oraciones.
Perdona nuestras culpas.
Aleja de nosotros los castigos que merecemos
y haz que nuestro llanto
se convierta en alegría,
para que viviendo
alabemos tu Santo Nombre
y continuemos alabándolo
eternamente en el cielo.
Amén.


Oración
Súplicas para tiempos difíciles



Divino Niño Jesús:
Tengo mil dificultades, ayúdame.
De los enemigos del alma: sálvame.
En los desaciertos: ilumíname.
En mis dudas y penas: confórtame.
En mis soledades: acompáñame.
En mis enfermedades: fortaléceme.
Cuando me desprecien: anímame.
En las tentaciones: defiéndeme.
En las horas difíciles: consuélame.
Con tu corazón paternal: ámame.
Con tu inmenso poder: protégeme.
Y en tus brazos al expirar: recíbeme.
Amén.




Oración en demanda
del socorro de María


¡Madre de Dios y reina de los ángeles!
¡Esperanza de los hombres!
¡Mira al que te llama y a Ti recurre!
Me postro ante Ti, yo, pobre esclavo,
me consagro por tu siervo para siempre
y me ofrezco a servirte y honrarte
cuanto pueda, toda la vida.

Poco puede honrarte un esclavo tan ruin
y rebelde que tanto ha ofendido
a mi Dios y Redentor.
Pero si me aceptas, aunque sin merecerlo,
y con tu intercesión me haces digno,
tu misma misericordia me hará santo
y te daré el honor que yo sólo no puedo.
Acéptame y no me rechaces, Madre mía.

Estas ovejas perdidas vino a rescatar
el Verbo eterno, y por salvarlas se hizo
Hijo tuyo. ¿Despreciarás a esta oveja
extraviada que a Ti recurre para encontrar
a Jesús? Ya está entregado el rescate
que me salva; mi Salvador ya derramó
Su Sangre preciosa, la que basta
para salvar mil mundos.

Basta que esa Sangre se me aplique,
y ésto en tus manos está, Virgen bendita.
En tus manos está salvar al que quieres.
Ayúdame, mi Reina, y sálvame.
En Ti confío a tu intercesión me entrego.
Salud de los que te invocan, sálvame.



Oración a San Miguel Arcángel



San Miguel Arcángel, defiéndenos en la batalla;
sé nuestro amparo contra la perversidad
y asechanzas del demonio.
Reprímale Dios, pedimos suplicantes;
y tú, Príncipe de la milicia celestial,
arroja al infierno con el divino poder
a Satanás y a los otros espíritus malignos,
que andan dispersos por el mundo
para la perdición de las almas.
Amén.


Por favor recemos el Santo Rosario: