jueves, 8 de noviembre de 2018

Dedicación de la Basílica de San Juan de Letrán - Año 324 - Fiesta Noviembre 9


Basílica de San Juan de Letrán

Basílica significa: "Casa del Rey"

En la Iglesia Católica se le da el nombre de Basílica a ciertos templos más famosos que los demás. Solamente se puede llamar Basílica a aquellos templos a los cuales el Sumo Pontífice les concede ese honor especial. En cada país hay algunos.

La primera Basílica que hubo en la religión Católica fue la de Letrán, cuya consagración celebramos en este día. Era un palacio que pertenecía a una familia que llevaba ese nombre, Letrán. El emperador Constantino, que fue el primer gobernante romano que concedió a los cristianos el permiso para construir templos, le regaló al Sumo Pontífice el Palacio Basílica de Letrán, que el Papa San Silvestre convirtió en templo y consagró el 9 de noviembre del año 324.


Esta basílica es la Catedral del Papa y la más antigua de todas las basílicas de la Iglesia Católica. En su frontis tiene esta leyenda:

"Madre y Cabeza de toda las iglesias de la ciudad y del mundo"
Se le llama:
"Basílica del Divino Salvador"
Porque cuando fue nuevamente consagrada, en el año 787:

"Una imagen del Divino Salvador, al ser golpeada por un judío, derramó sangre"

Rostro del Salvador
detalle del mosaico del ábside
Basílica de San Juan de Letrán

En recuerdo de ese hecho se le puso ese nuevo nombre.

Columnas del velo del templo


El velo del templo de Jerusalén, que se rasgó en dos partes al morir nuestro divino Salvador, era sostenido por dos columnas, las cuales hoy día se conservan en el claustro de la Basílica de San Juan de Letrán, en Roma.

Se llama también Basílica de San Juan (de Letrán) porque tienen dos capillas dedicadas la una a San Juan Bautista y la otra a San Juan Evangelista, y era atendida por los sacerdotes de la parroquia de San Juan.

Durante mil años, desde el año 324 hasta el 1400 (época en que los Papas se fueron a vivir a Avignon, en Francia), la casa contigua a la Basílica y que se llamó "Palacio de Letrán", fue la residencia de los Pontífices, y allí se celebraron cinco Concilios (o reuniones de los obispos de todo el mundo). En este palacio se celebró en 1929 el tratado de paz entre el Vaticano y el gobierno de Italia (Tratado de Letrán). Cuando los Papas volvieron de Avignon, se trasladaron a vivir al Vaticano. Ahora en el Palacio de Letrán vive el Vicario de Roma, o sea el Cardenal al cual el Sumo Pontífice encarga de gobernar la Iglesia de esa ciudad.

La Basílica de Letrán ha sido sumamente venerada durante muchos siglos. Y aunque ha sido destruida por varios incendios, ha sido reconstruida de nuevo, y la construcción actual es muy hermosa.

San Agustín recomienda:
"Cuando recordemos la Consagración de un templo, pensemos en aquello que dijo San Pablo:


‘Cada uno de nosotros somos un templo del Espíritu Santo
Ojalá conservemos nuestra alma bella y limpia, como le agrada a Dios que sean sus templos santos. Así vivirá contento el Espíritu Santo en nuestra alma".
Fuente - Texto tomado de EWTN.COM:

Impresionante realidad: carta de un alma condenada al Infierno


Carta de un Alma Condenada al Infierno

Este material no es del gusto actual, de la sociedad moderna, por supuesto del gusto mundano, ni lamentablemente de muchos entre los llamados fieles cristianos. Debemos prestar atención hoy día a esta realidad y verdad de fe definida en la Iglesia Católica, acerca de la existencia del infierno y de su duración eterna. Tristemente, el abandono consciente o inconsciente de su consideración, está llevando a muchos a negar su existencia, con consecuencias más que lamentables en la conducta y en su ineludible juicio Divino.


Dios se comunica con nosotros de muchas maneras:

Carta de un Alma Condenada al Infierno
Parte 1


Carta de un Alma Condenada al Infierno
Parte 2


Carta de un Alma Condenada al Infierno
Parte 3


Carta de un Alma Condenada al Infierno
Parte 4


Audios tomados de YOUTUBE:

https://www.youtube.com/watch?v=H6R-nPI3E2k

https://www.youtube.com/watch?v=iv478WEKRww


https://www.youtube.com/watch?v=Tk_M4qa1A04


https://www.youtube.com/watch?v=4EyBj4A3RJM

¿PROFECÍA? Obispo Sheen describió las trampas que usará el Anticristo para engañarnos y la forma de evitarlo


Carmelo López-Arias / ReL - 4 de noviembre de 2017

La presencia del Anticristo es una de las señales que los Padres de la Iglesia y la mayor parte de los teólogos sugieren como precursoras del fin del mundo.

Así consta en las Sagradas Escrituras, donde es definido por San Juan como "el mentiroso, el que niega que Jesús es el Cristo, el que niega al Padre y al Hijo" (1 Jn 2, 22) y por San Pablo como "el hombre del pecado, el hijo de la perdición, el Adversario que se eleva sobre todo lo que lleva el nombre de Dios o es objeto de culto, hasta el extremo de sentarse él mismo en el Santuario de Dios y proclamar que él mismo es Dios" (2 Tes, 3-4).

En su estudio de la cuestión, el jesuita Francisco Suárez (1548-1617) afirma como próximo a la fe que será una persona, y no, como en ocasiones se ha interpretado, un movimiento o una ideología: "El Anticristo no sólo será verdadero hombre, sino también verdadera persona humana, persona propia y connatural a la humanidad; así que no será la persona de un demonio encarnada".

Apariencia de santón humanitario, incluso cristiano

¿Cómo reconocerlo e identificarlo? Hay toda una tradición literaria católica, que va desde Señor del Mundo de Robert Hugh Benson a El Padre Elías de Michael D. O'Brien, que lo dibuja como un ser de apariencia nada acorde con su terrible designio: al contrario, como una persona que atraerá precisamente por su apariencia benéfica y su capacidad de halago a las tendencias tanto más amables cuanto más disolventes de la cultura en la que nazca.

Ésa es también la visión del obispo Fulton J. Sheen (1895-1979), quien hizo un inquietante retrato del Anticristo en un sermón radiofónico del 26 de enero de 1947:

"El Anticristo no se llamará así, de otra forma no tendría seguidores", advertía el obispo Sheen: "No llevará vestiduras rojas, no vomitará azufre, no llevará tridente". En aquel momento Sheen era solo un sacerdote que deslumbraba en la radio y en la naciente televisión con sus predicaciones y ya había escrito varios libros. Destacaba por su anticomunismo, al que consagraría en 1948 su obra El comunismo y la conciencia occidental, pero no sería hasta 1951 que fue nombrado obispo auxiliar de Nueva York, y en 1966 obispo de la diócesis neoyorquina de Rochester.

"El gran objetivo del Anticristo, explicaba Sheen, será, como el del demonio, parecerse a Dios: ¿Cómo conseguirá entonces seguidores para su religión?".

Y desgranó estas características:

»-Se disfrazará como el Gran Humanitario: hablará de la paz, de la prosperidad y de la abundancia no como medios para llevarnos a Dios, sino como fines en sí mismos.

»-Escribirá libros sobre la nueva idea de Dios para acomodarlas a como vive la gente.

»-Divulgará la fe en la astrología para que sean las estrellas, y no la voluntad, las responsables de nuestros pecados.

»-Justificará la culpa como sexo reprimido, hará que los hombres se avergüencen de no ser considerados abiertos de mente y progresistas por sus compañeros.

»-Identificará la tolerancia con la indiferencia entre el bien y el mal.

»-Fomentará el divorcio bajo de que es “necesario” que haya una tercera persona.

»-Hará que crezca el amor por el amor y decrezca el amor por las personas.

»-Invocará la religión para destruir la religión.

»-Incluso hablará de Cristo y dirá que es el mayor hombre que jamás haya vivido.

»-Dirá que su misión es liberar a los hombres de las servidumbres de la superstición y el fascismo, a los que nunca definirá.

»-En medio de todo su aparente amor por la humanidad y su fácil verborrea sobre la libertad y la igualdad, guardará un secreto que no dirá a nadie: él no creerá en Dios. Y como su religión será la hermandad sin la paternidad de Dios, embaucará incluso a los elegidos.

»-Fundará una anti-Iglesia, que será una imitación de la Iglesia porque el demonio es el mono de Dios. Será el cuerpo místico del Anticristo, que en todo lo exterior se parecerá a la Iglesia como cuerpo místico de Cristo. En su búsqueda desesperada de Dios, inducirá al hombre moderno, en su soledad y frustración, a comprometerse cada vez más en su comunidad, que dará al hombre una visión más amplia de las cosas sin necesidad alguna de conversión personal y sin admitir la culpa individual. Son días en los que el demonio se le soltará particularmente la cuerda".

Pese a estos preocupantes signos, "los cristianos deben comprender que un momento de crisis no es un momento de desesperación, sino una oportunidad", y que tras la Crucifixión viene la Resurrección.

Para no figurar entre los engañados

Y proponía un plan de vida para estar preparados ante los engaños del Anticristo:



-Colgar un crucifijo en casa "para recordar que tenemos una cruz que llevar".

-Rezar cada noche el rosario en familia.

-Ir diariamente a misa.

-Hacer a diario la Hora Santa ante el Santísimo, "especialmente en parroquias cuyos párrocos son conscientes de las necesidades del mundo y llevan a cabo actos de reparación".

-Rezar a San Miguel Arcángel, recordándole que ya venció una vez el orgullo de Lucifer.

-Rezar a la Santísima Virgen, "porque le ha sido dado el poder de aplastar la cabeza de la serpiente".

-"Conservar el estado de gracia quienes tengan fe, y quienes no la tengan que empiecen a buscarla, porque en los tiempos que vienen solo habrá una forma de que las rodillas dejen de temblar, y será caer sobre ellas y rezar".

Fuente - Texto tomado de RELIGIONENLIBERTAD.COM:
https://www.religionenlibertad.com/obispo-sheen-describio-las-trampas-que-usara-anticristo-para-60312.htm