domingo, 25 de agosto de 2013

San Melquisedec - Rey y Sacerdote del A.T. (Sacerdote del Dios Altísimo) - Figura típica de Cristo - Fiesta Agosto 26


San Melquisedec
Rey de Salém y Sacerdote del A.T.
Sacerdote del Dios Altísimo - Figura típica de Cristo
Martirologio Romano. Conmemoración de San Melquisedec, rey de Salém y sacerdote del Dios Altísimo, que saludó y bendijo a Abrahán cuando volvía victorioso, ofreciendo al Señor un sacrificio santo, una hostia inmaculada. Como figura típica de Cristo, ha sido interpretado rey de la paz y de la justicia y sacerdote eterno, aún falto de genealogía.

En el Antiguo Testamento, es un notable sumo sacerdote, profeta y líder que vivió después del Diluvio y durante los tiempos de Abrahán. Se le llamó rey de Salém (Jerusalén), Rey de paz, Rey de justicia (el significado hebreo del vocablo Melquisedec) y sacerdote del Dios Altísimo. Esta referencia, con muy escasos detalles, se encuentra en Génesis 14, 17-20:
"Por lo cual el rey de Sodoma le salió a recibir en el valle de Savé, que es el valle del rey, cuando volvía de la derrota de Codorlahomor, y de los reyes sus aliados.

Pero Melquisedec rey de Salém, presentando pan y vino, pues era sacerdote de Dios Altísimo, le dio su bendición, diciendo:

'¡Oh Abram!, bendito eres del Dios excelso, que crió el cielo y la tierra: y bendito sea el excelso Dios, por cuya protección han caído en tus manos los enemigos!'


Y dióle Abram el diezmo de todo lo que traía".
La Iglesia considera a Melquisedec como figura de Cristo. En el canon de la Misa se lo menciona cuando el celebrante pide al Padre que acepte las ofrendas "como aceptaste... la oblación santa e inmaculada de tu sumo sacerdote Melquisedec".

Como sacerdote-rey es una prefiguración del mismo Jesús que, además de ser Profeta, también es Sacerdote y Rey. Con la presentación del pan y el vino marca lo que después será el sacerdocio instituido por Cristo y que sustituirá al sacerdocio levítico.

Fuente - Texto tomado de ES.CATHOLIC.NET:

Fuente - Texto tomado de ES.WIKIPEDIA.ORG:

Lectura del Santo Evangelio Según San Lucas 13, 22-30



22. E iba así enseñando por las ciudades y aldeas, de camino para Jerusalén.

23. Y uno le preguntó:
"Señor, ¿es verdad que son pocos los que se salvan?"
Él en respuesta dijo a los oyentes:
24. "Esforzaos a entrar por la puerta angosta; porque os aseguro que muchos buscarán cómo entrar, y no podrán.
25. Y después que el padre de familia hubiere entrado y cerrado la puerta, empezaréis, estando fuera, a llamar a la puerta diciendo:
"¡Señor, Señor, ábrenos!"
Y él os responderá:
"No os conozco, ni sé de dónde sois"
26. Entonces alegaréis en favor vuestro:
"Nosotros hemos comido y bebido contigo, y Tú predicaste en nuestras plazas"
27. Y Él os repetirá:


"No os conozco, ni sé de dónde sois. Apartaos lejos de Mí todos vosotros, artífices de la maldad"
28. Allí será el llanto y el rechinar de dientes, cuando veréis a Abrahán, y a Isaac, y a Jacob, y a todos los profetas en el reino de Dios, mientras vosotros sois arrojados fuera.

29. Y vendrán también gentes del oriente y del occidente, del norte y del mediodía, y se pondrán a la mesa en el convite del reino de Dios.

30. Y ved aquí que los que son ahora los últimos serán entonces los primeros, y los que son primeros serán entonces los últimos".

Palabra de Dios,
Gloria a Ti, Señor Jesús