sábado, 8 de octubre de 2011

Lectura del Santo Evangelio Según San Mateo 22, 1-14


1. Entretanto Jesús, prosiguiendo la plática, les habló de nuevo por parábolas, diciendo:

2. "En el reino de los cielos acontece lo que a cierto rey que celebró las bodas de su hijo.

3. Y envió sus criados a llamar los convidados a las bodas, mas éstos no quisieron venir.

4. Segunda vez despachó nuevos criados con orden de decir de su parte a los convidados:
"Tengo dispuesto el banquete; he hecho matar mis terneros y demás animales cebados, y todo está a punto; venid, pues, a las bodas".
5. Mas ellos no hicieron caso; antes bien se marcharon, quien a su granja, y quien a su tráfico ordinario.

6. Los demás cogieron a los criados, y después de haberlos llenado de ultrajes los mataron.

7. Lo cual oído por el rey, montó en cólera, y enviando sus tropas acabó con aquellos homicidas, y abrasó su ciudad.

8. Entonces dijo a sus criados:
"Las prevenciones para las bodas están hechas, mas los convidados no eran dignos de asistir a ellas."
9. Id, pues, a las salidas de los caminos, y a todos cuantos encontréis convidadlos a las bodas.

10. Al punto los criados, saliendo a los caminos, reunieron a cuantos hallaron, malos y buenos, de suerte que la sala de las bodas se llenó de gentes, que se pusieron a la mesa.

11. Entrando después el rey a ver los convidados, reparó allí en un hombre que no iba con vestido de boda.

12. Y díjole:
Cielo e Infierno

"Amigo, ¿cómo has entrado tú aquí sin vestido de boda?

Pero él enmudeció.

13. Entonces dijo el rey a sus ministros de justicia:

"Atado de pies y manos, arrojadle fuera a las tinieblas; donde no habrá sino llanto y crujir de dientes.

14. Tan cierto es que muchos son los llamados y pocos los escogidos".

Palabra de Dios,
Gloria a Ti, Señor Jesús.